En el panorama actual en el que la competencia para encontrar trabajo es tan grande, debemos intentar destacarnos sobre los demás candidatos para lograr nuestro objetivo. Una buena forma de lograrlo es preparándose bien de cara a la entrevista, mostrando que además de tener un buen curriculum, disponemos de otra serie de aptitudes que serán de gran valor para la empresa.
Preparar con antelación cada paso que vamos a dar nos ayudará a mostrarnos confiados y seguros y mejorará nuestra imagen frente a la empresa, que es quien evaluará nuestra candidatura. Ellos van a prepararse la entrevista así que, ¡nosotros también debemos hacerlo!
Estos son nuestros diez consejos para preparar la entrevista:
- Antes de acudir a la cita debemos informarnos acerca de la empresa que nos va a entrevistar. Para ello podemos visitar su web e investigar el sector en el que opera, los servicios que ofrece, cuáles son sus clientes importantes, sus proyectos a corto plazo y sus planes de expansión, su cultura corporativa y su visión. De esta forma, descubriremos el perfil del candidato que están buscando y podremos adecuar nuestras respuestas.
- Ahora que ya sabemos lo que esperan de nosotros, llega el momento de estudiar nuestras aptitudes para el trabajo. Debemos pensar tanto en nuestra experiencia como en la formación que hemos recibido y que nos capacitará para desempeñar eficazmente el puesto de trabajo al que aspiramos.
- Debemos detectar los puntos débiles de nuestro curriculum y buscar los puntos fuertes que nos ayudarán a rebatir cualquier objeción, ya que posiblemente nuestros entrevistadores también los tendrán en cuenta y nos preguntarán por ellos.
- También debemos ensayar las posibles preguntas que nos puedan hacer. De esta forma minimizamos el riesgo de quedarnos en blanco, o de dar respuestas que no se acomoden al perfil que la empresa está buscando. Conociendo las preguntas a las que podemos enfrentarnos nos sentiremos más tranquilos y daremos una imagen mejor. En la próxima entrada veremos algunas de estas preguntas y la mejor forma de responderlas.
- Prepararemos un par de copias de nuestro curriculum, ya que podemos encontrarnos con más de un evaluador o incluso con que el curriculum que entregamos en su momento podría no estar actualizado o presentar algún deterioro. También debemos leerlo un par de veces para conocerlo perfectamente. Al fin y al cabo, muchas de las preguntas de la entrevista se basarán en él. También podemos llevar material de escritura para tomar notas y tarjetas de visita si las tuviéramos.
- Si dispusiéramos de referencias de trabajos anteriores también podemos llevarlas a la entrevista. Estas referencias ayudarán a la empresa a hacerse una idea favorable de nosotros en aspectos que no están recogidos en el curriculum.
- Si la cita se hubiera producido por escrito, lo correcto sería llamar para confirmar nuestra asistencia.
- Si no conocemos la zona en la que se ubica la empresa donde vamos a realizar la entrevista, deberemos planificar el transporte, teniendo presente el tiempo que tardaremos en llegar para evitar impuntualidades. En algunos casos puede ser interesante realizar esa misma ruta con anterioridad.
- Para evitar prisas y desastres de última hora, prepararemos el día antes la ropa que vamos a llevar, revisando que esté limpia y planchada. Al fin y al cabo, nunca hay una segunda oportunidad para dar una buena primera impresión. Es conveniente evitar llevar ropa llamativa, ya que ignoramos la política de la empresa con respecto a la indumentaria. Como siempre, la prudencia será nuestra mejor aliada.
- Calcularemos la hora de despertarnos o empezar a prepararnos teniendo en cuenta el tiempo que necesitaremos para no ir con prisa y sin tener un margen tan amplio que nos pongamos nerviosos. Si la entrevista se celebrara a primera hora de la mañana, la noche antes cenaremos ligero y nos acostaremos pronto para acudir despejados y con buen aspecto.