Entre la Nacional 232 (N-232) y los meandros que el Ebro dibuja al lado del pueblo de Briones, se alza Vivanco. Vivanco es Bodega, Fundación y Experiencias tal y como reza su lema, y todo ello para compartir la cultura del vino.
Museo de la Cultura del vino
En la recepción del Museo nos esperaba Eduardo Ochoa (quien ejerció de anfitrión, guía del museo y la bodega) a los alumnos, acompañantes y profesores del MBA especialidad Enología.
Igual explicaba el Kylix griego, una vasija de cerámica que equivaldría a nuestras copas actuales, como el funcionamiento de la mesa de selección que se utiliza en la vendimia en la recepción de esta. Desde aquí le enviamos nuestro agradecimiento por su profesionalidad y paciencia.
Historia de la familia Vivanco
La visita comenzó con un vídeo a modo de introducción en el que se cuenta la historia de la familia Vivanco,
así como los motivos de la construcción de todo el complejo, sus colecciones y las diversas labores que realizan dentro de su fundación.
Desde el principio, te puedes dar cuenta que todo está realizado con mucho criterio, esfuerzo y tiempo.
Icono de la Cultura del Vino en el mundo
El museo sencillamente es impresionante, son 4000 m2 distribuidos en 5 salas con exposiciones permanentes, una sala de exposiciones temporales y el Jardín de Baco en su parte exterior, un viñedo plantado con una colección de vides que cuenta con más de 220 variedades de todo el mundo.
Cada sala está dedicada a un momento dentro de la cultura del vino, en las que se mezclan elementos relacionados con el vino, obras de arte y elementos audiovisuales que de forma sencilla explican diferentes procesos en la elaboración del vino.
En la Sala 1, Nacer, Crecer, Madurar, hace referencia a los 8000 años de historia del vino, su origen, su proceso de elaboración, las tierras, la forma de cultivo, las amenazas de la vid, la vendimia, elaboración y hasta lo referente al laboratorio.
La sala 2, Guardar las Esencias, nos encontramos con todo lo referente a la preocupación por conservar y transportar el vino en las mejores condiciones, Barricas, botellas, corcho también necesario para la guarda del vino.
Las Bodegas de Vivanco
La Bodega, el Sueño viene representada en la Sala 4 en la que se explican los distintos trabajos que se realizan dentro de la bodega.
La sala 4, El vino, Arte y Símbolo nos encontramos con las colecciones que muestran la huella del vino en las creaciones del hombre, donde las obras de arte de valor incalculable sorprenden de manera asombrosa, y lo realmente asombroso es que todas ellas tengan el mismo hilo conductor o el mismo punto de partida, el vino. Tengo que reconocer que en esta parte nos faltó tiempo, hay piezas verdaderamente fantásticas, llenas de historia y belleza.
Y por último llegamos a la Sala 5, Abrir, Servir y Beber. La colección de 3500 sacacorchos de diferentes tamaños colores formas, de bolsillo, figurativos, de bar, diseños actuales, sacacorchos multifunción, religiosos, de palanca, eróticos, etc. es sencillamente impresionante. La colección de esta sala también reúne elementos de servicio desde la antigüedad clásica a comienzos del siglo XX. vasos, copas, jarras, decantadores, porrones, etc.
Ya con algo más de prisa nos dirigimos a visitar la bodega donde nos mostraron los procesos de elaboración sus diferentes vinos, mostrándonos los diferentes elementos que conformaban la bodega, como la mesa de selección, prensas, tinos de madera, parque de barricas etc. Una bodega moderna, funcional y diseñada para un trabajo rápido y eficaz, tal y como a Rafa Vivanco, enólogo de la bodega, le gusta trabajar.
Los vinos de Vivanco
Después de la fantástica visita, llego el momento de probar los vinos de la bodega:
- Vivanco Blanco 2015, elaborado con Viura, Tempranillo Blanco y Maturana Blanca.
- Vivanco Crianza 2013 tempranillo al 100 % y 16 meses en barricas de roble francés y americano.
- Vivanco Reserva 2009 90% Tempranillo, 10% Graciano y 24 meses en barricas nuevas y de segundo año de roble francés y americano.
- Vivanco 4 varietales 70% Tempranillo, 15% Graciano, 10% Garnacha y 5% Mazuelo. 16 meses de estancia en barricas de diferentes tonelerías, tostados y orígenes, sin trasiegos.
Los vinos acompañaron una fantástica comida en la que no pudieron faltar las patatas a la riojana, la berenjena rellena, la chistorra, el embutido y el queso, para rematar con canutillos rellenos de crema, que a más de uno encandilaron y fresas.
Nuestro agradecimiento a la familia Vivanco y a su Fundación, y no me gustaría terminar sin decir que la visita al Museo resulta imprescindible para cualquier amante, aficionado o simple consumidor de vino, realmente merece la pena.
David Barro, Responsable de ventas nacional de Coalla Logística y tutor del MBA Enología de IMF Business School
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