¿Quién no conoce ya el palabro ‘startup’?

Startup por aquí, Startup por allá…

STARTUPMuchos no paran de decirla, como si tan solo existiese esta forma de emprender. El emprendimiento ha sido (y será) una actitud, y no un modelo de negocio.

Se tiende a confundir cualquier empresa de nueva creación como ‘startups’, pero no lo es. Intentemos darle luz.

Lo primero que define al término ‘startup’ es que no existe como modelo de negocio con una base. Nacen de ideas de base tecnológica principalmente, aunque van parejas a la innovación o desarrollo de herramientas para mejorar procesos, sean cuales sean. Al no tener una base de modelo de negocio viable necesitan ‘incubar’ la idea y darle forma como negocio. La idea puede ser genial, espectacular, que si no se encuentra un modelo de negocio está condenada al fracaso. Es necesario obtener un Producto Mínimo Viable y ofrecerlo a potenciales clientes.

Así encontramos a gente que tiene una idea y está irremediablemente condenado a ser ‘emprendedor’, ya que no existe tal cual en el mercado, ni tampoco ninguna empresa donde se le pueda contratar. Existen algunas empresas donde la figura del ‘Intrapreneur’ es buscada y respetada, pero aún así no deja de tener que colocarse en el banquillo de los emprendedores para hacer cristalizar su idea.

Una vez se pasa la fase de incubación se llega a lo que muchos ya conocen, y es la parte de aceleración, donde se puede ver en periódicos, revistas o la TV cómo ‘levantan’ inversión en las organizaciones de Capital Riesgo. Es la parte más delicada de todas las fases. Una mala elección puede dar al traste con la ilusión puesta en la idea. Y no es por la falta de dinero, que en muchas ocasiones es más que suficiente, pongamos el ejemplo de Gowex, el ICO y el CDTI pusieron mucho dinero, dejando el control a la empresa. Esa elección, en su caso, fue el detonante de su caída. El dinero no lo es todo, no tuvieron el acompañamiento necesario para hacer de esa empresa un negocio viable.

LEE:  7 estrategias de influencia, por José Luis Pérez Huertas

Una vez se está en el mercado y se consolida el modelo, el propio inversor sale de la empresa y deja al emprendedor de forma autónoma, aunque nunca se deja de tener contacto.

Tengo actualmente una en mi cartera, a la que ya le he dicho que ellos no son una ‘startup’, sino una copia de un modelo de negocio. El hecho de ser ‘nueva’ no significa serlo. Ni tampoco el uso de tecnología implica que deba serlo.

Una ‘startup’ es un modelo de negocio que aún no existe, y por ello hay que desarrollarlo. Y la mejor manera es pasar por las fases que se han ido describiendo.

The following two tabs change content below.
Consultor Digital, CEO y Socio-Fundador de Socialcorp Consultoría Digital y Servicios Profesionales, hoy os invitamos a descubrir un nuevo artículo elaborado por nuestro experto en marketing digital y digital coach, Jordi Torregrosa. Informático, vendedor, gestor, director y emprendedor. Un multidisciplinario reconvertido en empresario -con los tiempos que corren-. Su formación le ha dado la oportunidad de realizar sus sueños. Se ha puesto como misión ayudar a conseguir metas y cubrir necesidades de los demás, crear valor, diferenciarse, transmitir su conocimiento y evolucionar. Su lema es "Buscando las conexiones futuras".

Latest posts by Jordi Torregrosa (see all)

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *