¿Conoces los efectos del teletrabajo sobre la salud de los trabajadores?

La pandemia ha puesto de manifiesto los riesgos del teletrabajo. Las medidas tomadas para controlar el coronavirus han dado un impulso al trabajo desde casa. Millones de personas han montado una oficina improvisada en su vivienda. Pero trabajar desde casa no es tan sencillo como abrir un ordenador. Por supuesto, tiene sus beneficios y las TIC hacen que, hoy en día, esto sea posible de forma cómoda. Pero los expertos en PRL saben que hay problemas derivados de esta actividad. Los efectos del teletrabajo en las personas son variados y pueden tener una repercusión importante en la salud.

Los profesionales dedicados a riesgos laborales pueden orientar a empresas y empleados en este ámbito. Una formación adecuada es clave para poder analizar estas situaciones en un entorno cambiante. Identificar los riesgos asociados al trabajo desde casa es clave para poder afrontarlos.

Principales efectos del teletrabajo

Hay que diferenciar varios ámbitos que se van a ver afectados por las personas que se han trasladado desde la oficina hasta su casa. El teletrabajo no solo nos afecta en lo físico, también tiene un claro impacto mental o psicológico.

Un estudio desarrollado por una empresa especializada en soluciones para el entorno laboral ha mostrado los problemas principales derivados del teletrabajo durante los meses más duros de la pandemia. De ese trabajo realizado en España se extrae que los ojos cansados ha sido el principal problema para la mayoría de empleados. Lo ha padecido un 53 % de los encuestados. Le siguen los dolores de cabeza (49 %) y de espalda (48 %). Además, el 37 % de las personas que han estado teletrabajando han reconocido sentirse solas o aisladas. La mayoría, un 52 %, ha reconocido estrés o ansiedad por tener que estar siempre conectadas para mostrar su compromiso con el trabajo. En este sentido, del estudio realizado se extrae que el 55 % de los encuestados consideran que su empresa no ha ayudado a montar un espacio de trabajo adecuado en casa. De hecho, el 43 % aseguró que tuvo que pagar de su bolsillo accesorios para prevenir dolencias que se suelen asociar al trabajo en casa.

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Los problemas derivados del trabajo desde casa se pueden diferenciar en diferentes tipos que vamos a analizar a continuación. Todos ellos tienen una clara repercusión en la vida diaria de las personas que los padecen.

Trastornos del aparato muscular y esquelético

El trabajo en casa suele hacerse en lugares que no están preparados para ello. No es habitual contar con una mesa apropiada ni con una silla de oficina. A ello hay que añadir la falta de una superficie adecuada o, incluso, el tiempo de trabajo y las pausas que se realizan. Eso se traduce en posturas incorrectas y su mantenimiento prolongado produce problemas en nuestro cuerpo.

Uno de los problemas más graves derivados de esta forma de trabajo es el sedentarismo. Normalmente, las actividades que se desarrollan en casa son las que se podrían calificar como cognitivas. Las personas las realizan, habitualmente, sentadas. Eso conlleva una falta de actividad física, que agrava el riesgo de enfermedades y contribuyen al deterioro de nuestro cuerpo. Pero este problema y la práctica ausencia de ejercicio también está relacionada con trastornos de tipo psicológico.

El trabajo desde casa está muy relacionado también con lo que se conoce como “síndrome de la patata en el escritorio”. Dicho de otro modo, el acceso a la comida en cualquier momento. Al estar en una habitación de la casa, el trabajador puede levantarse cuando quiera para acercarse a la cocina a tomar algo. Es habitual tomar alimentos con alto índice de calorías. Si eso se añade al sedentarismo, el resultado es el mayor riesgo de sobrepeso.

Cansancio mental

Uno de los puntos más atractivos del teletrabajo es la flexibilidad horaria. Pero se puede convertir en una desventaja cuando no hay una buena organización. Si no se delimita el tiempo de trabajo, el empleado puede estar operativo prácticamente todo el día. Eso termina afectando a la psicología, porque no hay una sensación real de desconexión del trabajo. Por el contrario, la sensación que se termina teniendo es que las 24 horas está pendiente de su tarea.

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Hoy en día, se asume que muchas enfermedades están relacionadas con problemas psicológicos. El teletrabajo presenta varios riesgos que pueden afectar directamente a las personas que lo ejercen. Es posible tener una percepción de soledad o de estancamiento profesional. Al mismo tiempo, se pueden encontrar dificultades para compaginar adecuadamente el trabajo y la familia. Una falta de supervisión puede llevar a un desarrollo inadecuado de la labor profesional, lo que se traducirá en estrés o en un aumento de la tensión, que tiene una clara repercusión en el organismo.

Probablemente, la distorsión del horario es el riesgo más grande para las personas que están trabajando desde casa. Es habitual caer en la adicción al trabajo, un exceso que lleva a las personas que están en su vivienda a desconectar de otras actividades.

La combinación del trabajo con las tareas domésticas es otro de los problemas habituales. Es fácil no respetar horarios de comidas o de otro tipo. Esto deriva, habitualmente, en un desarreglo de los biorritmos o, incluso, problemas con las parejas o los hijos.

Fatiga visual como consecuencia de trabajar desde casa

Los ojos también pueden terminar viéndose afectados como consecuencia del desarrollo de la actividad laboral en casa. Al igual que sucede con el resto del cuerpo, una falta de equipamiento apropiado es un riesgo. La iluminación en la vivienda no es la misma que la de las oficinas. A eso hay que añadir la pantalla del ordenador o una mala ubicación en la casa.

Una de las cosas que ha dejado clara la pandemia de covid-19 es que no podemos dar nada por sentado. Nuestra vida puede cambiar de un día a otro. Por ello es necesario estar preparado. La flexibilidad y la adaptabilidad son características que necesitan tanto los trabajadores como las empresas. Los riesgos para los empleados se asocian cada vez más con cuestiones psicológicas. La formación en riesgos laborales, estudiando la normativa y las posibles modificaciones que pueden ocurrir, es una apuesta segura para mejorar tu futuro laboral.

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