El mix energético Español

El mix energético en España: la energía eólica¿De dónde viene la energía que consumimos?

Cada vez hay más personas que se formulan esta pregunta. No en vano, en cada factura eléctrica que recibimos no es extraño encontrar un apartado que indica el origen e impacto ambiental de la electricidad consumida. En mi última factura sin ir más lejos, me encuentro con ese apartado al final de la misma. En él aparecen unos gráficos y tablas que desglosan la mezcla de tecnologías para la producción de energía a nivel nacional, expresado en porcentajes y recurriendo al dato promedio de 2014. Si bien es cierto que ese desglose se limita a diferenciar las fuentes de energía renovable, sin especificar su origen, frente a otras como ciclo combinado, carbón o nuclear. A continuación, aparecen los mismos datos correspondientes a la energía vendida por mi compañía comercializadora. Finalmente, se da una calificación al impacto medioambiental  de la electricidad, medido en una escala de la A a la G, como se hace con los electrodomésticos y más recientemente con los edificios. La calificación obtenida por mi compañía comercializadora es de una F; lo que no la deja en muy buen lugar frente a la media nacional situada en la letra D, que ya de por si no es especialmente buena. Esto hace pensar que quizá podríamos estar haciendo la cosas mejor…

La energía nuclear y la eólica, las principales fuentes de energía en España

Si echamos un vistazo a los datos más actuales disponibles sobre las fuentes de generación de energía en la península, aportados por el Observatorio de la Electricidad; obtenemos información actualizada mes a mes hasta mayo de este 2015. Lo más destacable de estos datos es que el puesto número uno en cuanto al origen de la electricidad por tecnología se lo disputan mes a mes las centrales nucleares y la energía eólica. Comenzamos el año con la balanza inclinada hacia la nuclear, con un aporte del 22,6% de la energía generada frente a un 20,4% por generación eólica. En febrero fue la energía eólica la que superó a la nuclear, aportando el 26,5% del mix energético, frente al 21,6 % aportado por la nuclear. Prácticamente mes a mes se han ido turnando el liderazgo, por lo que no cabe duda en cuanto a cuáles son las principales fuentes de generación de energía en nuestro país.

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Algo muy similar ocurre entre el tercer y cuarto puesto, disputado entre la energía hidráulica y el carbón. Salvo el mes de enero, en el que el aporte del carbón ascendió al 21,7% del total, superando incluso a la energía eólica, el resto de los meses se ha mantenido por debajo del 16%, alternando posición con la energía hidráulica, con porcentajes muy parecidos. Curioso resulta que a pesar de las inversiones millonarias que se hicieron en la década pasada en instalaciones de ciclo combinado (una forma curiosa de nombrar a las centrales térmicas de gas natural) la energía del carbón, la más cara y contaminante, siga siendo la más usada para generar electricidad de entre las energías fósiles.

Sin embargo, si observamos los datos globales de generación de energía mediante fuentes de origen renovable, a lo largo de los meses de 2015 de los que disponemos datos, se ha experimentado un preocupante retroceso frente a los mismos períodos de 2014. Por ejemplo, en enero de este año se generó un 35,3% del mix energético mediante fuentes renovables, un 34,74% menos que en enero de 2014. Situación que se repite mes a mes hasta mayo, fecha en la que las fuentes renovables experimentan un repunte alcanzando el 46,7% del total de energía generada, suponiendo un ascenso del 7,79% frente a mayo de 2014. ¿Cuál es el motivo de que experimentemos este retroceso durante varios meses consecutivos?

¿Todavía alguien duda de las ventajas del empleo de fuentes de energía renovable?

Hablamos de fuentes de energía que no emiten gases de efecto invernadero y por tanto son fuentes de energía limpia, pero que además tienen importantes beneficios económicos ya que evitan la compra de derechos de emisión de CO2, reducen nuestra dependencia energética del exterior, al reducir la importación de combustibles fósiles y generan empleo local.

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Como hemos visto, dentro de las energías renovables, parece que la energía eólica es la que recibe más atención. No obstante, también hay que hablar de las energías renovables con menos presencia en el mix energético: la solar fotovoltaica y la solar térmica. Entre las dos no llegaron a alcanzar el 8% de la energía generada a lo largo del pasado mes de mayo, mes especialmente favorable para este tipo de energía debido al número de horas de luz solar y a las altas temperaturas registradas en nuestro país, las más altas para ese mes desde que se tiene constancia. En un país como España, donde podemos garantizar tantas horas de sol al año como para convertir el turismo en una de nuestras principales fuentes de ingreso, ¿por qué no somos capaces de utilizar esas mismas horas de sol para producir energía y mejorar el balance de la energía que consumimos? Está claro que la respuesta está en la voluntad política de favorecer este tipo de fuente de energía, algo que hasta la fecha no se ha producido. Sin embargo, muchos vemos en el ello el único camino hacia el futuro y no perdemos la esperanza en que se reconduzca esa voluntad.

 

Álvaro Rodrígez, Director de Energías Renovables de IMF

 

Álvaro Rodríguez, Director del Área de Energías Renovables de IMF Business School

 

 

 

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