De acuerdo con los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), las empresas especializadas en actividades de transporte y almacenamiento mejoran en España un 2,8% su cifra de negocio en el mes de abril, lo que se traduce como el crecimiento más débil en el índice general del sector servicios, que cierra el cuarto mes del curso con un crecimiento del 5,2%.
No obstante, es un hecho evidente que las actividades logísticas van a seguir creciendo y que las cadenas logísticas tienen todavía un amplio margen de mejora en eficiencia y sostenibilidad. No olvidemos que las emisiones de CO2 siguen aumentando y que los diferentes modos de transporte utilizados pueden seguir superando sus niveles de eficiencia. Si tomamos como ejemplo el transporte por carretera y de acuerdo con los datos barajados por el profesor J. Road Franklin de la Khuene Logistics University la productividad media de un camión se encuentra entre un 25-33% y ratios semejantes podrían extraerse con el resto de vehículos de transporte: barcos, trenes, etc que siguen evidenciando márgenes de productividad susceptibles de mejora.
Para afrontar estos retos, existe el concepto de “Physical Internet (Internet Físico)” que utiliza la metáfora de Internet donde las mercancías físicas son susceptibles de ser tratadas en una red interconectada, especialmente diseñada para compartir recursos. Ahora bien esta red requiere del uso de unidades de carga standard.
Con el objeto de avanzar en este campo se ha financiado a nivel europeo el proyecto Moduluscha en www.modulushca.eu que aplica esta visión del internet físico en Europa y que entre otros objetivos busca la optimización de los procesos de transporte mejorando la capacidad de carga y reduciendo los viajes en vacío.
En este concepto de “Internet Físico” desarrollado por el proyecto no se trata directamente con mercancías sino con contenedores modulares que van acoplando los diferentes objetos y mercancías para optimizar el espacio. Se requerirá que los contenedores sean ecológicos, inteligentes y estandarizados en todo el mundo con el objeto de alcanzar una logística global.
El proyecto integra entre otros hitos:
- el desarrollo de un conjunto de contenedores iso-modulares que permiten adaptar diferentes tamaños de carga;
- la creación de un sistema digital que controla dichas unidades y
- el desarrollo de una plataforma logística interconectada que implique una reducción de costes y de las emisiones de CO2.