Uno de los sectores más afectados por la pandemia durante el 2020 fue el de la moda, es decir el sector textil.
Miles de tiendas dedicadas a la venta de ropa de temporada se vieron obligadas a cerrar durante el confinamiento. Perdiendo gran parte de la campaña de primavera y verano. Sin apenas haberse recuperado de las consecuencias de ese cierre, el sector sigue luchando por mantenerse en pie.
Muchas se han visto obligadas a reinventarse. Entre sus novedades incluyen la venta on-line, que por otro lado puede considerarse un avance y una manera de competir con las tiendas de grandes marcas que lo vienen haciendo desde hace tiempo.
También se vieron obligadas a invertir para poder llevar a cabo un protocolo de prevención frente a la Covid-19.
A las medidas generales que se aplican en todos los sectores y que todos conocemos podemos añadir unas medidas particulares para este sector textil. De tal forma que comprende las tiendas de ropa de cualquier tamaño, así como las tiendas de calzado.
Por sus especiales características, queda excluida de estas Directrices la venta ambulante o no sedentaria en la vía pública (mercadillos) y el comercio por teléfono u on-line, como se recoge Real Decreto 463/2020, de 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma para la gestión de la situación de crisis sanitaria ocasionada por el COVID-19.
Medidas de prevención frente a la Covid
Según se recoge en el documento que con el nombre de DIRECTRICES DE BUENAS PRÁCTICAS EN EL SECTOR DEL COMERCIO TEXTIL Medidas para la prevención de contagios del SARS-CoV-2 (09 DE JULIO DE 2020) publicó el INSST, se deben tener en cuenta las siguientes medidas en el sector textil:
Antes de la apertura
- Se favorecerá la estabilidad de los turnos con el fin de reducir al máximo el contacto entre diferentes personas
- Se evitará, en la medida de lo posible, la rotación de tareas.
- Las tareas y procesos laborales deben planificarse para que en la medida de lo posible, los trabajadores puedan mantener la distancia de seguridad de aproximadamente 1,5 metros.
- Se evitarán sistemas de fichajes por huella dactilar. Habilitándose otras vías para evitar el contacto de los trabajadores con una misma superficie. Si se utilizan, se deberá desinfectar el dispositivo de fichaje antes y después de cada uso, así como informar de la medida a los trabajadores.
- Verificar que la distancia de seguridad está garantizada en las zonas comunes. Y, en cualquier caso, deben evitarse aglomeraciones de personal en estos puntos. Se entiende como zonas comunes las destinadas a los clientes y las destinadas a los trabajadores.
- Se establecerán zonas de entrada y salida al centro de trabajo diferenciadas entre sí y también de las entradas públicas al local, siempre que sea posible. Estarán señalizadas adecuadamente con el fin de evitar cruces de personas.
En el centro de trabajo
- La atención debe ser individualizada, incluyendo la que se preste a los clientes que acudan con cita previa. Si se establece un sistema de recogida en el local de los productos adquiridos, deberá ser suficientemente escalonado para respetar el aforo. En todo caso, la atención a los clientes no podrá realizarse de manera simultánea por el mismo trabajador.
- Se establecerán distintas entradas y salidas públicas al local. preferentemente mediante puertas automáticas con detección de presencia o si esto no es posible, se valorará el mantener la puerta abierta. Si el tamaño del local lo permite, se pueden establecer pasillos de sentido único marcados con flechas, balizas, cartelería y/o señalización.
- Se prohibirá utilizar los aseos y ascensores a los clientes, salvo en caso de que resultara estrictamente necesario.
- A la entrada del local se dispondrá de carteles donde se indique el aforo máximo, las medidas a adoptar en caso de tener que esperar para entrar a las instalaciones y las medidas de higiene y prevención del contagio por vías respiratorias. Se recordará asimismo la prohibición de entrada al local en caso de presentar cualquier sintomatología asociada con el COVID-19.
- La distancia entre vendedor o proveedor de servicios y cliente durante todo el proceso de atención al cliente será de al menos un metro cuando se cuente con elementos de protección o barreras, o de aproximadamente 1,5 metros sin estos elementos. Cuando no sea posible, de acuerdo con la información recabada mediante la evaluación de riesgos laborales, se estudiarán otras alternativas de protección adecuadas (como el uso de equipos de protección personal).
- Se usarán barreras físicas cuando sea posible, por ejemplo en las cajas. Se recomienda la instalación de mamparas u otros elementos físicos de fácil limpieza y desinfección.
Otras recomendaciones generales en el sector textil
- El tiempo de permanencia en los establecimientos y locales será el estrictamente necesario para que los clientes puedan realizar sus compras o recibir la prestación del servicio.
- En las tiendas que dispusieran parcial o totalmente de una zona de autoservicio, el trabajador deberá facilitárselo al cliente. Con el fin de evitar la manipulación directa de los productos por parte de los clientes. En tiendas que tengan además otros productos diferentes a la ropa o al calzado, no se podrá disponer de productos de prueba.
- El calzado deberá ser probado preferiblemente con calzas que se desecharán tras cada uso en papeleras habilitadas a tal efecto.
- Se establecerá preferencia a los medios de pago electrónicos: tarjeta, móvil, etc. Se procederá a la limpieza del TPV tras cada uso.
- Se establecerán horarios y zonas específicas para los proveedores.
- En las oficinas también se establecerán las medidas necesarias para mantener la distancia social de, al menos, 1,5 metros.
- Los probadores serán ocupados por una única persona y se desinfectarán adecuadamente después de cada uso. Las prendas que no vayan a ser adquiridas o hayan sido devueltas se higienizarán antes de volver a ofrecerse al público.
- Se informará y formará a los trabajadores sobre los riesgos de contagio y propagación del coronavirus. Con especial atención a las vías de transmisión, y las medidas de prevención y protección adoptadas.
- Se consultará a los trabajadores y se considerarán sus propuestas
Conclusión
Con el fin de controlar la extensión del virus conviene recordar la obligación de notificar todos los casos positivos y sospechosos. Recientemente el Ministerios ha publicado una nueva revisión del documento ESTRATEGIA DE DETECCIÓN PRECOZ, VIGILANCIA Y CONTROL DE COVID-19. De obligada lectura para las empresas en la que aclara la forma de actuar ante las distintas situaciones que pueden darse. Siendo la más importante la de la comunicación de casos a las autoridades sanitarias de cada comunidad autónoma.
En ella también se definen las distintas situaciones, que aparecen resumidas en el siguiente cuadro extraído del propio documento:
Recordad, todos debemos colaborar respetando las indicaciones de las autoridades sanitarias, solo así podremos controlar la extensión del virus.
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