Estudiar un Máster en Recursos Humanos hoy en día es tener muy claro el foco de tu trabajo, personas. Por eso es importante saber cuál y dónde. Un buen punto de partida es tener claro qué vas a ganar cursando una formación así. Hay una serie de habilidades que vas a aprender y son verdaderamente esenciales si quieres dedicarte a la gestión del talento de la organización.
Aprendiendo a construir la evolución
Tener personas formadas en el área de personas es esencial para una buena gestión en el interior de cualquier compañía. Hoy, lo que entendemos como Recursos Humanos está viviendo un momento muy bonito porque está dejando de ser algo estático, más rígido y ejecutor. Una de las mejores cosas de estudiar el Máster en Recursos Humanos ahora es poder tener una visión mucho más global y cercana.
El cambio está sucediendo y aprender de qué manera puedes ayudar en las relaciones entre los profesionales y la organización, te permitirá desarrollar una serie de habilidades clave, desde las básicas o técnicas hasta las soft skills que son esenciales.
¿Qué son las habilidades?
Con las habilidades técnicas tenemos claro que necesitamos aprender y practicar. Con las llamadas habilidades blandas (soft skills), necesitamos adquirirlas, interiorizarlas y alinearlas con nuestra propia esencia para que no sean simplemente unas competencias a las que recurramos en el trabajo. Una competencia adquirida lo es cuando forma parte de nuestra personalidad, de nuestros valores.
Las habilidades nos aportan la capacidad de hacer algo, la destreza para ser más ágiles que otras personas, así que es importante desarrollarlas para poder aportar lo mejor en el equipo. Como ya hemos comentado, el hecho de ser más estratégicos nos aporta un poder mayor a la hora de incidir en la toma de decisiones (una de las habilidades que aprenderás).
¿Cuáles son las habilidades que aprenderás?
Estudiar un Máster en Recursos Humanos te ayudará a tener esa visión 360º, a ver personas y no empleados, porque el foco no es gestionarlos, sino conectarlos, es entender que se genera una experiencia a la que darle mayor cuidado.
Normalmente cuando nos dedicamos a RRHH, se presuponen competencias relacionadas con la orientación a personas, una cierta sensibilidad para escuchar y atender a los empleados. Hay que dotarse de fluida comunicación, empatía y asertividad. Cada persona es un mundo, y la organización es el entorno donde nos juntamos, por eso es importante tener un buen equilibrio para no solo solucionar problemas, sino aportar valor.
Habilidades técnicas
Estas habilidades son las que necesitas para realizar alguna función en concreto para la organización. Se necesita aprender a programar si esa va a ser tu profesión o has de saber cómo funciona una herramienta para utilizarla. Este tipo de competencias son las que llamamos técnicas, porque están relacionadas con tu día a día y más allá de que te puedan servir fuera de allí, son necesarias para ejercer.
Conocer los recursos tecnológicos para la gestión de talento, esa es una de las habilidades que aprenderás. Sabrás cuáles son las nuevas tecnologías, los softwares de gestión de Recursos Humanos y tendencias para estar a la última y poder aportar en la organización. Debes tener todo lo necesario para poder liderar la transformación digital de la empresa, desde RRHH. Hay que poder optimizar el tiempo y saber gestionar proyectos con las tecnologías adecuadas (CRM, herramientas para valorar el clima laboral, plataformas colaborativas
Otra de las habilidades técnicas es el conocimiento en leyes y normativa para poder gestionar toda la parte más burocrática y administrativa de la plantilla.
People Analytics
Estamos de lleno en la época de los datos y ahora más que nunca hay que saber de Big Data y esto en RRHH, es People Analytics. Se trata de toda la información y los datos necesarios de las personas de la empresa que nos ayudarán a valorar su desempeño, a conocer sus necesidades y motivaciones y que agilizará procesos.
Soft skills
Estas habilidades son las que están relacionadas con la inteligencia emocional y la forma de ser de cada persona. Son las que te ayudarán a entender el entorno, a gestionar tus emociones al relacionarte con otros, a adaptarte mejor a las dificultades que lleguen, a mediar en algún conflicto, y por tanto a trabajar mejor en equipo.
Aprenderás liderazgo, gestión de conflictos, cómo analizar la situación para tomar las mejores decisiones. Se trata de entender que vas a participar de la gestión estratégica, así que vas a tener que entender cómo alinear a las personas con los objetivos de la organización.
A pesar de que las habilidades técnicas son necesarias, cada vez más las soft skills están ganando puntos frente a las primeras. Se ha demostrado su importancia, porque independientemente del rol profesional, las habilidades sociales son un factor de éxito en las relaciones personales. Eso nos ayudará a fomentar un buen ambiente de trabajo.
Escucha activa y empatía
La escucha activa es una de las mejores herramientas para la relación con el equipo y una buena comunicación. Habilidades que también desarrollas en RRHH. Ten en cuenta que es necesario que el área de personas sea un buen espacio para todos los empleados, donde puedan informar de sus necesidades, motivaciones y posibles dificultades. De esta manera ganamos en cohesión y el compromiso y confianza de las personas se incrementa.
La empatía es de esas habilidades que te ayudará hagas lo que hagas, porque en cualquier situación nos relacionamos con otras personas. Entender a los demás y poder aportar las adecuadas soluciones para ayudarles es algo que RRHH debe poder hacer por su equipo.
Employer Branding
Entender que RRHH ha dado un paso adelante es primordial. Estudiar un Máster en Recuros Humanos hoy, es sinónimo de innovación en la gestión del talento. Debes tener las herramientas para poder elaborar estrategias de gestión del talento, desde crear un Mapa de Talento, a saber, cómo diseñar el Employee Journey Map y entender cuáles y cómo cuidar los MOT (Moments of Truth). Tenemos que dar un paso adelante y trabajar no solo la conexión hacia dentro. Debemos trabajar para ser una empresa atractiva para venir a trabajar, y atraer así el talento que realmente necesita la organización.
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