El TFG (Trabajo Fin de Grado) es, para muchos jóvenes universitarios, el primer contacto con el mundo de la investigación, por ello es algo que les preocupa y genera mucho estrés. El estudiante universitario en España está acostumbrado a memorizar conocimientos para exponerlos en un examen, pero no para enfrentarse a un trabajo de investigación. En muchas ocasiones, después de estudiar los tres o cuatro años de grado no han realizado ningún trabajo que requiera investigación. Y es en el último año les piden un trabajo de investigación del que depende obtener el título.
Las claves para afrontar un TFG de Recursos Humanos
Leer atentamente la normativa facilitada por la facultad
En muchas ocasiones simplemente se ojea sin detenerse a valorar todos los apartados, es importante analizar todos los requisitos sobre extensión, formato, dirección o tutorización y evaluación y calificación del TFG.
Elección del tema de tu TFG
En algunas facultades dan la posibilidad de elegir el tema, aunque en otras lo asignan. En todo caso, siempre lo debes afrontar con ilusión y motivación. Si pudieras elegir, deberías empezando por hacer una lista de temas que te interesen y que además puedan ayudarte en completar tu perfil profesional. De la lista de temas, selecciona tres. De esos tres seleccionados, reflexiona sobre cómo documentar la investigación, en cuál de ellos puedes encontrar mayor información que sea fiable. También puedes consultar con tus tutores sobre los posibles temas que has pensado, ellos tienen más experiencia y posiblemente te ayuden a analizar cuál es el más adecuado.
En Recursos Humanos, los temas pueden ir desde los más jurídicos del ámbito de las relaciones laborales al ámbito de la psicología y del desarrollo del factor humano en las organizaciones. Por ello, sería conveniente que te centrarás en una asignatura que domines y te ilusione y a partir de ahí realices la lista de temas antes citada.
Una vez elegido el tema y tener una idea clara sobre los objetivos del trabajo debes darlo a conocer al tutor designado que dirigirá tu proyecto.
Calendario de entregas
Se suele establecer en la primera tutoría, para ello sería adecuado estructurar el proyecto para saber el contenido de cada entrega. El ir realizando entregas al tutor te obligará a dosificar tu trabajo e ir perfeccionándolo. Es muy recomendable que te fijes un planning de tareas para evitar que se evitar dejar las cosas para el final.
Recopilación de información
Actualmente, encontrar información es muy fácil, pero no toda la información que nos encontramos es veraz y adecuada. Normalmente, Google es el buscador más habitual para encontrar contenidos, pero no debemos pensar que todos los contenidos son aptos para realizar nuestro TFG. Muchas veces estos contenidos no están debidamente identificados otras veces esos contenidos son falsos o imprecisos
Las fuentes de información que podemos usar pueden ser primarias compuestas por información no traducida ni abreviada como pueden ser los libros, artículos, monografías, etc. Éstas son quizás las fuentes menos manipuladas y más veraces. Pero también podemos usar fuentes de información secundarias, que son aquellas que son consecuencia de la reelaboración de fuentes primarias como pueden ser resúmenes, críticas, índices y otros. Es mejor siempre llegar a fuente primaria de la información para evitar el sesgo o las interpretaciones, corroborar los datos entre tanta información que se encuentra en la Web. Aunque, las fuentes secundarias mediante críticas, reconsideraciones y diferentes puntos de vista también son importantes para realizar un buen TFG.
Ante tantas opciones de información que existen en internet, los buscadores como Google, sin duda, os ayudarán mucho a encontrar información, pero os recomiendo consultar los buscadores más académicos y recordar que siempre deberéis citar y referenciar adecuadamente.
Organización
Una vez que cuentes con suficiente información, deberías organizar mediante esquemas todo aquello que quieres reflejar en tu trabajo.
Es importante que realices un índice con los puntos que crees más importantes. Debes tener en cuenta que los capítulos deben ir de lo general a lo específico, de manera que se comenzará con la información más básica para ir a lo más concreto.
Redacción
Para redactar tienes que tener en cuenta los diferentes capítulos que has planificado, para no divagar demasiado, dando vueltas sobre un mismo tema. Recuerda que se trata establezcas tu propio punto de vista con la investigación previa que has realizado, teniendo una visión crítica y reflexiva y un lenguaje técnico. No solo se trata de citar, tienes que demostrar a el tribunal que eres capaz de tener tu propia visión e ideas.
Pero también debes demostrar que has leído e investigado sobre el tema por ello es importante que cites y referencies adecuadamente, así tampoco te puede acusar de plagio. Las citas y referencias son muy importantes, la utilización de las citas y referencias bibliográficas de una manera coherente y uniforme está regulada a nivel internacional y nacional por diversas normativas. La norma actual es la ISO 690:2010 y en España, su equivalente es la UNE-ISO 690:2013 enlace: https://www.aenor.com/normas-y-libros/buscador-de-normas/UNE?c=N0051162
Introducción y conclusiones
Lo último que debes redactar son la introducción y las conclusiones. Son dos apartados esenciales que el tribunal, sin duda, analizará más exhaustivamente que el resto del trabajo.
Aunque parezca extraño la introducción debe redactarse al final incluso después de las conclusiones. Se necesita tener una perspectiva general y amplia del trabajo para realizar la presentación del mismo. En la introducción se debe ser hábil para poder captar la atención del lector, el objetivo de esta primera parte del TFG será realizar una breve descripción del trabajo que vamos a realizar, exponer las motivaciones del por qué del tema elegido y de cuáles son los puntos claves y de qué forma has afrontado su estudio e investigación.
Igual de importante son las conclusiones, que son las que cierran el trabajo y permiten comprobar si existe una congruencia entre el resultado y la labor investigadora y de estudio realizado, demostrando que la metodología empleada y los datos son adecuados para lograr los objetivos del trabajo. No deben exponerse informaciones que no se hayan expuesto anteriormente en el cuerpo TFG. Debería tener una extensión de no más de 400 palabras.
Si el TFG está bien estructurado, con ideas y argumentos coherentes y bien organizados, elaborar y redactar las conclusiones será tarea muy fácil.
Defensa del TFG
Es el último trámite y el que produce más estrés, pero si has realizado un buen TFG es el momento más reconfortante porque van a valorar tu esfuerzo y dedicación.
Debes tener en cuenta que el tiempo de exposición y asegurarte de resaltar los apartados más importantes de tu trabajo. Es muy aconsejable plantear cuestiones a las que tú mismo respondas y argumentes con referencias que hayas utilizado en tu investigación. El lenguaje debe ser sencillo, pero también incluyendo términos técnicos. El power point o prezi que realices debe ser atractivo y debe ser una herramienta de apoyo, no un guion, por lo que no es muy adecuado que leas lo que está escrito.
Responde a las preguntas del tribunal de manera concisa y con seguridad, nunca debes interrumpir al tribunal durante su intervención y por último da las gracias al tribunal por sus valoraciones y comentarios y por su atención durante tu presentación.
Tras aprobar el TFG y terminar la carrera con éxito, la mejor opción es cursar un Máster en Dirección y Gestión de Recursos Humanos para estar realmente preparado para enfrentarte al mundo laboral.
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