Llega el WIFI 6, con mejor seguridad y velocidad

Wifi es una de las palabras de la década sin lugar a dudas. Si hubiera estadísticas seguramente estaría dentro del top ten de las más pronunciadas porque se ha convertido en una necesidad para muchos seres humanos. El problema al comienzo no fue su lentitud, sino simplemente si las podríamos encontrar fuera de casa, pero en apenas unos años el único inconveniente es su velocidad, y esto probablemente se solucionará en buena medida con la llegada de WIFI 6.

Wi-Fi Alliance, el organismo que promueve dicha tecnología a nivel mundial, acaba de presentar a bombo y platillo la nueva versión que llegará a nuestras vidas en los próximos meses. No se trata de una irrupción cualquiera porque las expectativas con este producto son muy altas, sobre todo en lo que afecta a la seguridad y a la velocidad, dos de las cuestiones clave cuando hablamos de conexión en red.

Las novedades que trae el WIFI 6

De entrada, es un tipo de conexión que utiliza tecnología 802.11ax. Esta resolución 8K es capaz de mejorar el rendimiento de una forma sobresaliente ya que afecta directamente a la potencia de la red, por lo que sobre todo permitirá que se consuman de forma mucho más efectiva los vídeos, siempre y cuando puedas descargarlos en la misma resolución. También supone un impacto positivo sobre las sobrecargas en red, que se verán disminuidas gracias a que Wifi 6 es más eficaz a la hora de aprovechar toda la densidad de la misma.

Se trata también de una conexión que otorga más capacidades al router, lo que se traduce en menos interrupciones a la hora de navegar, y esto repercute tanto en la velocidad como en el rendimiento. Solo hay que pensar en esas redes inalámbricas que se desconectan constantemente en el peor, cuando estamos por ejemplo trabajando en algo urgente, para entender el salto que puede suponer este nuevo Wifi si realmente es tan efectivo como se ha explicado.

Pero no solo consigue mejorar el rendimiento a través de la velocidad, sino que también incide en el problema de la saturación de redes, de manera que la versión 6 ofrecerá más cobertura, lo que debería atenuar en buena medida este problema actual. Además, el ahorro en batería promete ser enorme, ya que estima que será de aproximadamente un 40 % en relación a la media de los equipos actuales con las conexiones inalámbricas que todos disponemos. Para conseguirlo, se apoya en un nuevo estándar en los tiempos de espera de los equipos conectados a la hora de recibir nuevos paquetes informativos.

Más seguridad digital

Más allá de todas sus virtudes prácticas, las que afectan al rendimiento, también podremos notar otras virtudes con menos repercusión directa sobre el funcionamiento de los equipos pero con una importancia capital para la prevención, no menos importante que la velocidad de la conexión o cualquier otra variable citada anteriormente. De esta forma, gracias a la activación del protocolo WPA3 se podrán evitar ataques basados en la fuerza bruta, por lo que la seguridad se blindará mucho más de lo que lo está actualmente. Y es que éste es un punto clave para cualquier usuario medio en los tiempos que corren, donde cualquier persona que utilice internet con cierta asiduidad sabe ya de los problemas a los que se enfrenta si no es responsable con su seguridad digital.

Si bien se notarán especialmente todas sus virtudes en entornos públicos, que suelen estar más saturados, Wifi 6 de igual modo supondrá un gran avance en el hogar, donde, aunque no lo parezca, también existe una sobrecarga de dispositivos conectados; un número que además irá en aumento, como ha ocurrido desde que la conexión wifi llegó a nuestras vidas.

Aún así, lo único que podemos saborear a día de hoy con respecto a este nuevo avance tecnológico es lo que nos ha contado Wi-Fi Alliance, porque en la práctica no podemos empezar a disfrutarlo todavía y, lo que es peor, tampoco tenemos un deadline que nos permita empezar a tachar días en el calendario. Sabemos que será en 2019, algo es algo, pero toca esperar nuevas informaciones que afinen un poco más en la fecha definitiva para verla en el mercado, donde aterrizará de forma paulatina para no generar un terremoto tecnológico.