Mujeres que más han contribuido a la inteligencia artificial

Poco a poco los libros de historia le están dando el espacio protagonista que se merecen a muchos nombres femeninos que durante muchísimas décadas pasaron desapercibidas. Por eso, y porque la tecnología es tradicionalmente un mundo mayoritariamente masculino, es muy necesario evitar que este mismo proceso que han vivido sectores más tradicionales se dé igual en el la tecnología. Por ejemplo, el área de la inteligencia artificial es uno de los que mejor puede presumir de un abanico de mujeres cuya contribución ha sido decisiva para el desarrollo tan sobresaliente que ha alcanzado la materia hoy en día. Nosotros queremos hacer de altavoz de algunas de estas brillantes féminas:

Ada Lovelace

Ser una mujer matemática nacida a comienzos del siglo XIX en Londres, concretamente en 1815, no debió ser tarea sencilla. Pese a las dificultades, Ada fue capaz de brillar con luz propia y pasar a la historia de la inteligencia artificial. Se la considera la primera programadora de la historia. En su desarrollo cultural y profesional tuvo mucho que ver su madre, que permitió que su hija se formara con otra científica, Mary Somerville.

La carrera de Lovelace despegó de la mano de Charles Babbage, creador de la máquina analítica, uno de los antecedentes de los ordenadores. Lovelace tradujo al inglés un artículo que trataba sobre esta máquina que acabó incluyendo una descripción de lo que se considera el primer algoritmo desarrollado para ser procesado.

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Karen Spärck Jones

Algo más de un siglo después, también en Inglaterra, concretamente en Huddersfield, vino al mundo Karen Spärck, una de las mujeres que marcó la pauta en el sector de la recuperación de la información y procesamiento del lenguaje natural, tecnología base para poder desarrollar el reconocimiento de voz, instrumento fundamental por ejemplo en los asistentes del hogar.

Llegó a ser vicepresidenta de la Academia Británica por lo que tuvo un reconocimiento en vida a la altura de sus aportes; de hecho, se le concedió también la BCS Lovelace Medal precisamente, siendo la primera mujer en conseguirlo, en el año 2007.

Margaret Hamilton

Es una de las científicas más brillantes nacidas en el sXX (1936). Por ejemplo, ni más ni menos que el programa espacial Apolo es en el que más involucrada estuvo Margaret Hamilton, que fue la líder del equipo de trabajo que desarrolló el software de navegación onboard. Además, también tuvo mucho que ver con el software engineering, uno de los ámbitos de la inteligencia artificial que tiene más peso en la actualidad. Todos estos logros los alcanzó desde su posición de Directora de Ingeniería de Software del Laboratorio Instrumental del MIT, puesto que abandonó para fundar su propia compañía, Hamilton Technologies Inc.

Katherine Johnson

Esta centenaria matemática y física nacida en Estados Unidos en el año 1917 compartió espacio profesional entre otras con Margaret Hamilton y Dorothy Vaughan. Johnson fue clave para el progreso del programa espacial norteamericano gracias a su trabajo en el área de la navegación astronómica. En la NASA existía un grupo de ‘computadoras humanas’, mujeres que calculaban a mano en los tiempos en los que los ordenadores no eran fiables. De todas ellas, la mejor fue Johnson. Ellas, más que contribuir directamente al desarrollo de la inteligencia artificial, se merecen estar en esta lista por ser algunas de las precursoras de lo que hoy en día podemos disfrutar.

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Mary Jackson y Dorothy Vaughan

Ambas coincidieron también con Katherine Johnson en la NASA, que recogía en sus instalaciones a los mejores cerebros de la ciencia de la segunda mitad del sXX. Estas científicas de distintas especializadas tuvieron un papel decisivo en la evolución de la alta tecnología, que es la que nos ha llevado a, entre otras cosas, disfrutar en el sXXI de la inteligencia artificial. Pero también fueron auténticas heroínas en lo social, ya que por ejemplo Jackson fue la primera ingeniera negra de la NASA. La vida de estas dos mujeres afroamericanas y también de Johnson fue dada a conocer en la película ‘Figuras ocultas’, estrenada en el año 2016.

Frances E. Allen

En el año 1957 llegó a IBM esta informática nacida en estadounidense que se convirtió en la primera fémina en 40 años en recibir el premio Turing, que es considerado el equivalente al Nobel en el mundo de la computación, allá por 2006. Su éxito profesional se debe al trabajo en el desarrollo de compiladores, que son programas informáticos que traducen el lenguaje de programación al común.

Robin Murphy

Además de estas mujeres que han jugado un papel clave en la tecnología de la segunda mitad del sXX, existen muchas otras que lo hacen en tiempo presente. Es el caso por ejemplo de Robin Murphy, profesora de Ciencias de Computación e Ingeniería en la Universidad de Texas, y experta en inteligencia artificial, en cuya investigación está centrada. Su reputación e influencia en el área de la inteligencia artificial es enorme, y además destaca por su visión tan personal de la robótica, la cual ha conseguido poner al servicio de los rescates en desastres naturales.

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Terah Lyons

Todavía más joven y cercana a nuestro tiempo es Terah Lyons, directora ejecutiva de la Alianza para la inteligencia artificial, una especie de consorcio de la industria tecnológica centrado en desarrollar mejores prácticas para los sistemas de inteligencia artificial y en educar a la sociedad sobre la inteligencia artificial en general. Es otra de las firmas femeninas más influyentes en el mundo de la IA; tanto que incluso trabajó como asesora política de la dirección tecnológica de la Casa Blanca durante la presidencia de Barack Obama.

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