La crisis de los microchips es uno de los temas que mayor preocupación están ocasionando a la industria en la actualidad. La falta de suministros ha provocado un parón en las fábricas de todo el mundo. Además, a consecuencia de esta situación, se está produciendo el desabastecimiento de un elevado número de productos en el mercado. Por ejemplo, dispositivos electrónicos como las videoconsolas y tarjetas gráficas, entre otros. Esto, sin lugar a dudas, está ocasionando graves pérdidas económicas.
Te vamos a hablar de las causas y consecuencias de esta situación, así como de la relación entre la cadena logística y los microchips. Las persona con estudios y conocimientos sobre el tema han de desarrollar una estrategia para poder afrontar la situación.
Crisis de los microchips
La pandemia ocasionada por la COVID-19 ha provocado un auge del trabajo remoto, la educación online y el ocio digital. Esto ha ocasionado un incremento de la demanda de ciertos bienes de consumo. Sobre todo, en sectores como la electrónica, ya que ha habido una mayor venta de ordenadores, tablets, cámaras para hacer videoconferencias, etc.
Por otra parte, también se ha disparado la venta de los vehículos eléctricos, debido al declive de energías fósiles como el petróleo, así como a una mayor consciencia medioambiental. Se calcula que un coche puede llevar hasta 100 componentes electrónicos y alrededor de 20 a 40 microcontroladores. Esto supone más o menos el 35 % del precio del coche.
Todo esto ha ocasionado que las industrias automotrices y tecnológicas rivalicen por hacerse con el mayor número de chips posible. De hecho, la Unión Europea consume cerca del 40 % de la oferta de semiconductores del planeta.
Causas
A raíz de la situación, se ha disparado aun más la demanda de semiconductores, lo que ha agravado la crisis de los microchips. Antes de que empezara la pandemia, ya había problemas para el suministro de microchips. Fabricantes de talla mundial como Intel ya tenían problemas para poder suministrar los chips que demandaban sus clientes. Las causas que han originado esta crisis son varias. A continuación, te las vamos a explicar con una mayor profundidad:
- La demanda supera con creces la oferta disponible. La rápida recuperación de la actividad industrial después del parón ocasionado por la covid-19 ha disparado la demanda de chips. Se calcula que, a lo largo de este año 2022, la demanda pueda incrementarse en un 17 % más. Evidentemente, la cadena de suministros no tiene la capacidad suficiente para poder abastecer este aumento. De hecho, el cuello de botella que vivimos está provocado por el diseño actual de dicha cadena. Pese a los esfuerzos por aumentar la producción, las medidas no son suficientes para abastecer los mercados.
- Algunas marcas han hecho acopio de microchips. Desde el punto de vista ético, esta práctica es bastante discutible. Algunas marcas han dedicado acaparar la mayor cantidad de microchips posible. A consecuencia de esto, evidentemente, otras marcas se han quedado sin componentes. Debido a una falta de regulación o norma que impida esta estrategia, las acciones están teniendo una serie de consecuencias.
- La producción mundial está concentrada en unos pocos fabricantes. Se estima que el 60 % de los chips son fabricados en el continente asiático. Principalmente, en países como Corea del Sur y Taiwán. Algunos datos apuntan a que estos dos países producen el 83 % de los chips de procesador y un 70 % de los chips de memoria a escala mundial. Asia fue una de las primeras regiones del mundo que se vieron afectadas por la propagación del covid-19. Esto originó, entre otras medidas, que se cerraran todas las fabricas, lo que ha provocado que la producción de microchips a nivel mundial quedara bastante afectada.
- Mala gestión de los stocks. Un chip requiere de unos meses de fabricación, ya que ha de pasar por un elevado número de procesos de manufacturación. Debido a la falta de materias primas, toda la cadena de producción se ha visto afectada. Se han puesto en evidencia las fallas en la administración de stocks de emergencia.
Consecuencias
Como bien sabes, los microchips son totalmente necesarios para una gran cantidad de sectores industriales. Forman parte de los dispositivos electrónicos de electrodomésticos y ordenadores, así como de los vehículos.
Precisamente, la industria automotriz ha sido uno de los sectores más castigados por esta escasez de suministros. Numerosas plantas de fabricación de coches de Norteamérica y Europa han tenido que interrumpir la producción de vehículos debido a la falta de componentes. Afecta muy especialmente a la fabricación de vehículos eléctricos, ya que estos necesitan una gran cantidad de chips. Como hay una mayor demanda de vehículos eléctricos, aun se agrava más el problema.
También el sector tecnológico sufre las consecuencias de esta escasez de componentes. Esto ha ocasionado que los consumidores finales tengan dificultades para poder comprar productos como, por ejemplo, las consolas de videojuegos PlayStation o Xbox. De hecho, sus precios se han disparado en algunos sitios web de compra online.
¿Qué pasará en el futuro próximo?
La situación actual no tiene una solución en el corto y medio plazo. Las empresas han tenido que buscar alternativas para paliar los efectos de la falta de suministros. Tanto los fabricantes como los proveedores van a verse obligados a cambiar su filosofía de diseño. Tendrán que hacerlo si desean estar al día con los diferentes cambios de capacidad por los que va a pasar la industria de los semiconductores.
Además, los fabricantes van a tener que realizar nuevos diseños para todas las estructuras electrónicas, con el fin de reducir el uso de microchips y pasar a sistemas más centralizados. No obstante, implementar estas medidas requiere un tiempo de desarrollo que puede llegar a los cinco años. Esto, sin lugar a dudas, va a seguir generando retrasos en la entrega de productos.
En resumen, podemos decirte que tener una buena formación te permite afrontar situaciones como la crisis de microchips con unos sólidos conocimientos del sector. No lo dudes y pide más información del máster en logística de IMF Business School.
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