Es bien conocida la pirámide de cinco niveles de Maslow, en ella, su autor estratifica las necesidades del ser humano. En este post, vamos a descubrir qué es la pirámide de Maslow y cómo aplicarla para alcanzar la felicidad en el trabajo. Recordemos que esta pirámide se divide en: necesidades fisiológicas, de seguridad, de afiliación, de reconocimiento y de autorealización. Desglosaremos una a una para encontrar esas pequeñas claves de felicidad.
La pirámide de 5 niveles de Maslow
Necesidades más básicas
Comenzando por la base de esta pirámide, donde hallamos las necesidades más básicas y esenciales, encontramos en el primer nivel, las necesidades fisiológicas, que son principalmente la alimentación y el descanso. En este aspecto y no ya para la felicidad si no para el correcto desarrollo de nuestro día a día, es fundamental que el trabajo nos permita un correcto descanso y unos hábitos de alimentación saludables.
Necesidad de seguridad
En el siguiente estrato Maslow, nos habla de la necesidad de seguridad, a este respecto nuestra satisfacción en el trabajo estará ligada a la certeza de poder mantenerlo en el tiempo y a un salario digno que nos permita no vivir en la incertidumbre de si poder hacer frente a los gastos cotidianos.
Necesidades sociales
El tercer nivel de la pirámide considera los aspectos sociales como necesario para nuestra satisfacción personal, es decir, la importancia de tener un grupo social, un grupo de referencia, amistades, y relacionarnos de forma satisfactoria con ellos. En el ámbito laboral, es importante el crear equipo y que uno mismo se sienta bien incluido y bien considerado dentro del mismo. En esta línea son muchas las empresas que vienen realizando labores encaminadas a cohesionar a sus trabajadores como son actividades de Team Building, Cenas de empresa, etc.
Necesidad de estima o reconocimiento
El segundo nivel, y el más próximo a la cúspide, es la necesidad de estima o reconocimiento, es decir, la persona o el trabajador, no solo ha de tener sus necesidades básicas cubiertas y sentirse integrado en su grupo social si no que además ha de sentir la estima de este. Es importante que uno sienta el reconocimiento ya sea de sus compañeros o de sus superiores. Así como sentir el afecto de su grupo social.
Necesidad de autorrealización
Por último, y en la cima de esta pirámide se encuentra la necesidad de autorrealización, es el nivel más elevado y en el ámbito laboral es fundamental que uno sienta que sus tareas del día a día le realiza, ¿Qué quiere decir esto? Que el trabajador ha de sentir el éxito profesional y cubiertas sus necesidades, que siente la satisfacción en la propia realización de la tarea o en su finalización, es el nivel más elevado de satisfacción que implica la sensación de plenitud en la persona.
En caso de trabajos en los que los empleados no se sientes realizados, esa carencia puede compensarse con otras virtudes, es decir, incrementando la valía de otros de los estratos: un elevado sueldo, un grupo social muy cohesionado, una seguridad laboral muy férrea. Y de esta manera se puede también lograr la satisfacción laboral haciendo que los diferentes niveles de la pirámide estén compensados, aunque es importante que no falte ninguno de ellos si se desea lograr la felicidad en el trabajo.
¿Cómo proceder cuando en nuestro trabajo hay carencia de alguno de estos estratos?
Es fundamental revisar que en nuestro trabajo estén presentes los cinco niveles comentados, en caso de carencia de alguno de ellos, debemos o bien fomentarlo o bien compensarlo. En este caso, es importante el asertividad, ya que en ocasiones puede que la demanda haya de ser transmitida a un superior o bien a los compañeros de trabajo.
Si nos encontramos en búsqueda de empleo es importante también tener en cuenta estos cinco aspectos y aunque algunos de ellos no lo podamos conocer a priori, como por ejemplo el buen o mal ambiente laboral, es fundamental tenerlo en cuenta.
¿Cómo aplicar la pirámide de Marslow al ámbito laboral?
A la hora de incorporar estos cinco niveles al ámbito laboral, en ocasiones invertimos la pirámide, es decir, consideramos que el trabajo cubra nuestras necesidades fisiológicas, y ya nosotros cubriremos el resto de las necesidades o bien con nuestro ámbito social de amigos o familia y con la realización que podemos hallar en el ocio destinado al deporte o nuestros hobbies. Esta es una manera de ser una persona plena y vivir con felicidad, pero al no ver satisfechas todas nuestras necesidades en el trabajo, obviamente no nos sentiremos plenos en él.