Puede parecer una obviedad el hablar de qué gastos pueda o no tener un Emprendedor, pero muy posiblemente de ello dependa la sostenibilidad de su proyecto de negocio. Podrá parecer que lo expuesto a continuación sea más bien encaminado a una empresa, pero nada más lejos de la realidad, ya que, por ejemplo un autónomo, también es extrapolable a un negocio pequeño, micro-empresa o incluso una figura de auto-empleo.
Lo primero es saber el montante final previsto de gastos, y para ello debemos hacer una lista de todos aquellos proveedores y compras que vayamos a realizar. Una vez los tengamos todos, incluidos aquellos que puedan ocurrir por un imprevisto, bien sea compra de papelería, algo de movilizado, o inmovilizado, ya que de ellos puede que nos desvíe nuestro cash flow.
Ahora llega el momento de la verdad, cuál de ellos son prioritarios, cuáles de ellos pueden esperar, o dejarlos en stand-by o directamente eliminados.
Para ello podemos ayudarnos de una simple hoja de cálculo, y que nos facilitará el poder conocer cómo afecta sobre nuestra tesorería a lo largo del tiempo.
Lo primero que hay que discernir son aquellos que repercuten directamente sobre el producto o servicio, cuáles son variables y cuáles no afectan en nada al desarrollo normal del negocio.
Podríamos enumerarlos así:
Directo sobre producto
Materia prima
Proceso
Impuestos, Tributos y demás cotizaciones
En caso de servicios, calcular la inversión en horas desestimando las anteriores.
Indirecto sobre Producto
Sueldos y nóminas
Logística
Almacenamiento
Ventas
Marketing
Variable sobre core del negocio
Administración
Contabilidad
Comunicaciones
Oficina, despacho o sede social
No directo sobre Negocio
Inmovilizado
Movilizado
Inversión en otros negocios
Como podemos comprobar, sólo unos pocos afectan directamente al corazón del negocio. Por lo tanto son muchos los gastos que afectan directamente al montante total del negocio y como repercusión a entrar en pérdidas o ganancias. Se puede vislumbrar que otros muchos pueden ser susceptibles de obviarlos, y no incurrir en gastos para poder dotar al negocio de la suficiente fluidez de caja para poder hacer frente a las cargas frente a los stakeholders, los llamados clientes internos y externos, incluidos nuestros amigos de la Administración pública.
Jordi Torregrosa
Últimos posts de Jordi Torregrosa (ver todo)
- Alertas de Google: cómo mejorar tu marketing - 13 septiembre, 2017
- Funciones y tareas del digital marketing manager - 28 agosto, 2017
- Alibaba vs Amazon vs El Corte Inglés: las últimas cifras - 25 agosto, 2017