Como en artículos anteriores, volvemos a tratar el tema de la eficiencia energética. Esta vez para hablar de iluminación en el hogar. Actualmente hay tantos tipos de iluminación en el mercado, que el consumidor ya no sabe cuál elegir: bombillas tradicionales, halógenas, de bajo consumo, fluorescentes y LED, en el transcurso de las auditorías energéticas hemos encontrado una pléyade de diferentes tipos colocadas muchas de las veces sin tener en cuenta el consumo que estos equipos suponen.
Está claro que cada estancia de la casa tiene uno o varios usos distintos, por lo que la iluminación de cada espacio debe atender esas necesidades concretas: no es lo mismo una zona de paso, que un espacio de lectura, una iluminación ambiental o la luz necesaria para cocinar o para arreglarse en el cuarto de baño. Con las bombillas tradicionales era muy fácil hacer la selección, eligiendo una bombilla de más potencia (más vatios) lográbamos una mejor iluminación, pero a cambio el consumo era mucho mayor. Las personas mayores con las que nos hemos encontrado sabían perfectamente diferencias la bombilla “de toda la vida” de 20W, de 40W o de 60W, dejando para casos especiales las de 100W que era para mucha necesidad de luz. Curiosamente se tenía clara esta diferencia pero no se asociaba siempre a un consumo energético tanto como a una cantidad de luz.
Pero con la aparición de otros tipos de iluminación como el bajo consumo, las halógenas y más recientemente las tipo LED la elección se ha complicado: además de la potencia, cuyo cálculo cambia según el tipo de bombilla, entran en juego otros factores como el ángulo de apertura de la luz y la temperatura de color.
Muy pocas personas saben diferenciar entre los diferentes grados de apertura de la luz y no lo relacionaban con la focalización de la misma. En algunas de las auditorías tuvimos que explicar que si lo que se quería era iluminar una vitrina o un cuadro vendría bien una luz focalizada en un punto, por lo tanto se debía elegir un ángulo de apertura pequeño; mientras que si se tenían varios puntos de luz en el techo para dar luz a una estancia era necesario buscar una que fuera más homogénea, que no generase sombras y por tanto se debería elegir un ángulo de apertura más grande.
Y otro quebradero de cabeza es sin duda la temperatura del color medida en grados Kelvin. Es muy habitual encontrarte con casas en las que han comprado las bombillas que están de oferta en la gran superficie y la casa tiene una luz blanca de quirófano hasta en el dormitorio. Es fundamental que se conozcan la diferencia de color de la luz para poder comprar la bombilla adecuada a cada situación. Así, generalmente las hay de tres tipos: cálida (entre 2700 y 3000 grados Kelvin), natural (entre 3000 y 4000 grados Kelvin) y fría (alrededor de 6000 grados kelvin). Generalmente en las viviendas se tiende a elegir tonalidades cálidas o naturales, ya que generan un tipo de luz más agradable dejando la luz natural para la cocina o los baños y la fría para el garaje.
Pero a la hora de lograr mejorar la eficiencia energética de las viviendas en lo que se refiere a la iluminación, lo más importante es sin duda tratar de implantar el tipo de iluminación que más ha evolucionado en los últimos años: la tecnología LED. Hasta hace unos años los LED se caracterizaban por que eran caros e iluminaban poco. Afortunadamente ya es posible encontrar LEDs adecuados para cada situación, teniendo en cuenta los factores descritos. Ya que además de la enorme variedad disponible en el mercado, hay otra ventaja fundamental: consumen hasta 10 veces menos que otras lámparas y duran hasta 10 veces más. Además a esto se une que, a diferencia de las tradicionales fluorescentes “de bajo consumo” no contienen mercurio ni otros componentes peligrosos que dificulten su reciclado y los hagan incluso peligrosos al contacto en caso de rotura.
Una renovación total de la iluminación de una vivienda por luces LED permite lograr un ahorro en las facturas de la luz de hasta un 35%.
Álvaro Rodríguez , Director Área Energías Renovables y Medio Ambiente de IMF Business School.
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