Hoy más que nunca vivimos en la sociedad del «ahora». Solemos tener lo que queremos, cuando queremos y dónde queremos. A riesgo de sonar demasiado nostálgico… puedo decir que se han ido los días en que teníamos que esperar durante horas delante de la televisión para escuchar de nuevo una canción o ver una película.
Estos valores están cada vez más difundidos por la sociedad, ocasionando en las organizaciones la urgente necesidad de evolucionar y adaptarse con el fin de dar respuesta a las expectativas de sus clientes tanto externos como internos. En las palabras de Bruce Lee: «la incapacidad para adaptarse trae destrucción».
Reinvención del área de Recursos Humanos
Por lo tanto, el área de recursos humanos no es una excepción y trata de reinventarse a sí misma, buscando que sus prácticas / políticas sean un ajuste perfecto con el nuevo modelo de la organización, contribuyendo en análisis final para su crecimiento.
Actualmente se llevan a cabo procesos de reclutamiento y selección más rápidos y eficientes; los resultados de la formación / desarrollo deben ser tangibles e inmediatos; la evaluación del desempeño tradicional tiende a ser reemplazada por procesos de feedback.
Se está popularizando la idea de la McDonaldización de las organizaciones y por consiguiente olvidamos el «verdadero» papel de los recursos humanos, es decir, el aspecto humanista que debería inculcar, siendo en última instancia el péndulo entre las demandas de los empresarios y los anhelos de los trabajadores.
Qué hacer y qué evitar
En este sentido, de vez en cuando es importante detenerse y reflexionar sobre cuestiones como: ¿Quién es el departamento de Recursos Humanos? ¿Cuáles son los valores fundamentales que definen sus políticas y acciones?
Pero así mismo cuestiones más personales como: ¿Fui suficientemente comprensivo con el problema que el empleado me presentó? ¿He adoptado una actitud positiva?
Es importante tener en cuenta que no estamos inventando la rueda, o incluso a descubriendo el fuego… se presentan algunos comportamientos que tienen por base el sentido común.
También que los gestores de recursos humanos saben de atrás hacia adelante. Pero en una base diaria con toda la locura y la tensión que estamos rodeados, es normal que sean enviados a un segundo plano. ¡Luego se hace la sugerencia!
Tiago Gouveia, Responsable del desarrollo de Recursos Humanos en SABSEG.
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