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Humanización en el liderazgo

Vivimos en la era de la transformación, del constante cambio. En Recursos Humanos debemos tratar de adquirir humanización en el liderazgo. Mucho más eficaz que nos conecte más con las personas.

Esto va de personas

Le voy a coger prestado a mi amigo Borja Rodrigo el slogan “esto va de personas” porque me parece de lo más acertado en este post.  Es uno de sus hashtags en LinkedIn para darnos cuenta de lo realmente importante.

La tendencia actual es que las organizaciones busquen en sus mandos intermedios, trabajar su desarrollo personal para que puedan llegar a ser esos líderes que conectan la parte más orientada al negocio y la parte más orientada a las personas.

Se busca implicar a las personas para que su paso por las organizaciones no sean cuatro líneas en el CV, sino que vivan una experiencia que realmente les aporte en su carrera. Los líderes ya no son jefes que mandan y ordenan y suben los números a los de más arriba. La innovación, la transformación digital, los knowmads, el employer branding… demasiados cambios en tan poco tiempo. O ¿realmente ha sido tan poco tiempo?

Todo eso ha provocado precisamente que los nuevos líderes sean los que lideren la verdadera transformación digital, la que viven las personas. De ahí que debamos hablar de humanización desde el liderazgo hasta toda esa transformación digital.

El nuevo líder más humano

Hemos hablado largo y tendido sobre el liderazgo descubriendo la infinidad de tipos de jefes que puede haber. Pero realmente el líder es que el consigue que los demás hagan todo lo bueno que pueden llegar a hacer y que además quieran hacerlo. Tiene un alto componente motivacional e inspiracional. Eso está irremediablemente ligado a la conexión que se genera entre las personas.

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Y si hay conexión puede haber inspiración. Ingrediente básico en todos los que se describen como buenos líderes. El líder más humano es sencillamente el más cercano, el más ético, el más natural y honesto.

Los líderes humanos, ¿se hacen o nacen?

Todas aquellas competencias que hacen bueno a un líder se pueden adquirir. Pero es evidente que unas conductas y actitudes, aceleran su desarrollo o lo ralentizan. La forma de ser nos condiciona, pero es mucho más potente el entorno, y aunque no todos pueden de entrada, se puede adquirir la habilidad.

Se puede ser un líder más humano, porque a ser humano se aprende. Nadie nos enseña, más allá de lo que nos vamos encontrando en la vida. Igual que ser un buen líder, porque depende de lo buena persona que uno sea, de lo más o menos humano que sea con los demás. Hay características que es cierto que ya vienen de serie, pero es importante entender que la base de un líder más humano está mucho más en la actitud que en la aptitud.

Humildad

Si hay una característica que define al líder más humano es la humildad. Cuanto más nos alejamos de nuestro equipo por prepotencia menos capacidad de conectar con nadie. La humildad acerca a las personas y genera entornos de afectividad que provocan relaciones con un impacto mucho más positivo.

La humildad nos regala la posibilidad de conocer nuestras limitaciones y debilidades, y saber que cuanto más vulnerables, más sinceros. Eso asusta, pero acerca de verdad a las personas.

Honestidad

Un líder más humano no puede ser alguien que no entienda que la honestidad es la carta de presentación. Si cuando conectamos con alguien, nos otorga el regalo de la honestidad, automáticamente empatizamos, seguimos a ese líder sin dudarlo. La sinceridad, la transparencia son las características que cualquier persona no solo agradecer, sino que necesita para que la relación con el otro sea fluida, sea productiva y provechosa para ambas partes.

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El líder más humano tiene aquí la oportunidad de poder ser él mismo, es la herramienta más fuerte y potente para conectar con otras personas. El líder que aun cree que cuanto más arriba esté él con mayor distancia de su equipo, que cuanta más información oculte o gestione sin colaborar con ellos, más lejos está de que realmente le consideren un líder.

Motivación

No aparece si no tenemos ambición, maestría y un propósito. Es lo que afirma Dan Pink, periodista estadounidense que afirma que esas 3 cosas son la fórmula de la motivación. Eso significa hacer algo por el simple hecho de que te guste, de que sepas hacerlo y de que te sirva para lograr algo que sea un objetivo para ti.

El líder más humano se siente motivado por inspirar, guiar y hacer crecer a su equipo. Siente que no está haciendo algo simplemente por dinero, sino que le encanta desarrollar a personas, conectarlas y generar algo mucho mejor juntos. Se trata de generar algo así como un corazón conjunto que mueva al equipo y eso se hace con motivación.

Confianza

El respeto, la comunicación y la motivación para generar ese eficiente entorno, nos lleva a la confianza. Se trata de que el líder tenga un entorno abierto, flexible y donde los miembros puedan sentirse libres para hablar, compartir, ser ellos mismos más humanos también. Hay que dejar de lado la fachada profesional para construir un yo más cercano, más real que nos haga ser mejores profesionales también.

Cuando un líder no sabe si la gente de su equipo trabaja con él o para él, es cuando debe parar y hacerse la pregunta. En la respuesta hallará la necesidad de mejorar o no.

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Hay que tener en cuenta que la cultura de la empresa es el eje por el cual todos los líderes transitan. No puede haber empleados con sentimiento de pertenencia, implicados y orgullosos si no hay conexión inicialmente con la cultura de la organización. Dejar toda la responsabilidad de la conexión entre el líder y el equipo, es un error. De esa manera solo vas a tener islas en las que cada uno irá en la dirección que marque su correspondiente líder, pero la conexión global con la organización… eso es un misterio que no deberías dejar a la deriva.

Cuando las personas comparten emociones y valores, hay un vínculo extremadamente fuerte. El impacto que eso tiene es muy bueno, ¿te imaginas que fuera hacia conseguir los mejores resultados para tu organización?

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Especialista en Employer Branding y asesora de Gestión del Talento en las empresas. Apasionada de la comunicación, las personas y cómo potenciar sus habilidades. Su objetivo es conectar a las personas en su entorno de trabajo.

2 Respuestas

    • Hola Juan, los Recursos Humanos como tal deben estar presentes en tu organización por pequeña que sea. Pero deja que me explique… se trata de que haya lo que tú o tu equipo necesitéis. Es decir, debes cuidar tu desarrollo de competencias y habilidades para crecer como profesional y poder adaptarte a lo que venga o necesites. No es necesario un departamento en si, muchas de las cosas operativas podrás externalizarlas. Pero otras como las relaciones humanas con quien sea (no es necesario contratar para ser bueno en eso), son tu responsabilidad. Eso no significa tener una parte de RRHH pero la gestión de personas debe ser algo que todo líder debe saber. Y todos lideramos de una forma u otra. Quizás hoy no tienes pensamiento de contratar, pero quien sabe más adelante… Gracias por comentar!

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