Ante la necesidad de buscar y atraer talento a tu organización se plantean las dudas sobre cómo presentar la oferta de trabajo. Los procesos de selección pueden ser más o menos efectivos en función de cómo gestionemos cada punto del proceso. Desde Recursos Humanos debemos cuidar todos los pasos, y uno de ellos es esa llamada de atención: la oferta de trabajo.
“Es que esto siempre se ha hecho así”
No puedes lanzar una oferta y sentarte a esperar. Eso es como decirle al candidato que ametralle con su CV a diestro y siniestro y se vaya a casa a esperar la llamada. Una oferta aislada, no os va a solucionar nada. Es más, probablemente sea un parche temporal que no va a tener frutos. Porque forma parte de un proceso más extenso, de una estrategia de Employer Branding para poder atraer de la mejor manera a ese talento externo que te interesa.
¿Quieres a cualquiera? Pues sigue con el método tradicional de título, mínimos requisitos, funciones, lugar de trabajo y horario. Espérate a que cualquiera se apunte y empieza un proceso de lo más improductivo. Pero ten en cuenta que según Infojobs, 9 de cada 10 descartan una oferta de trabajo porque no se ajusta a las condiciones que esperan encontrar. Y el 68% de los candidatos rechazaría una oferta de una empresa que no cuida su Employer Branding.
Si realmente quieres apostar no solo por el talento, sino por ese talento que mejor encaje contigo, sigue leyendo. Entiéndase encajar como aquello que permite a dos partes ser lo más productivas y eficaces posibles, no solo porque saben lo que hacen, sino porque lo disfrutan allí donde lo están haciendo.
Pasos previos a la creación de la oferta de trabajo
Analiza bien qué necesitas. No pidas la carta a los reyes magos. Determina bien con el máximo de información sobre la vacante, qué es lo que de verdad va a solucionarte el vacío que tienes ahora en la organización. Se trata de entender qué es crucial en ese puesto, funciones, competencias y requisitos que son imprescindibles por rol y por cultura. A partir de ahí ya tienes lo que quieres.
Ahora debes exponerte. Sí, debes compensar lo que pides con lo que ofreces. Explica bien qué vas a dar a cambio del talento que va a incorporarse a tu empresa. Detalla tu EVP (Propuesta de Valor al Empleado) para que la persona sepa qué va a encontrar, de manera que pueda sentirse identificado o no. No hagas perder el tiempo a la gente ocultando algo tan importante.
Cómo crear una oferta de trabajo
Tienes lo que quieres y lo que ofreces. Lo importante es trasladar esa información de una manera que llegue al target que necesitas. Muéstrate disruptivo, original, pon el foco en las cosas que más valoran las personas y llegarás mucho mejor.
Estructura
Estructura bien la oferta de trabajo para que las personas que te interesen no se pierdan por el camino y desistan antes de llegar al final. Esto no es una película en la que te puedes permitir dejar el giro maestro hacia el final. Como no enganches desde el primer episodio como si de Juego de Tronos tratase, no van a llegar al siguiente. Por lo tanto, estructura y ordena para que desde el principio atrapes: título, qué buscáis, quiénes sois y qué ofrecéis.
¿Qué buscáis?
Explica en qué va a consistir el trabajo, sus funciones, y qué va a tener que hacer la persona, dónde y cómo. Las responsabilidades del puesto y algún avance de los objetivos. Ten en cuenta que no es una descripción detallada de un puesto de trabajo, pero la persona debe hacerse más que una idea de qué va el puesto. Detalla todo aquello que sea relevante, no dejes información que pueda ser importante para las entrevistas o corres el riesgo de que haya talento que justo en este punto te abandone.
¿Quiénes sois y cómo es vuestro candidato ideal?
Cuenta quiénes sois y porque le buscáis, qué tipo de persona os encanta para llamar la atención de aquellos que sean así. Traslada en la oferta de trabajo aquellos valores que sabes que pueden despertar a vuestros similares. Explica cómo es trabajar ahí y porqué va a disfrutar con vosotros, qué valor aporta la compañía a la sociedad, qué valores compartís. Cuenta qué habilidades y competencias valoráis, cuáles son más ventajosas. Necesitas que se inscriban todos aquellos que pueden realizar las funciones y que además comparten vuestra cultura.
¿Qué ofrecéis?
Y aquí es donde cuentas qué vas a poder ofrecerle. Además del sueldo, piensa en todo aquello por lo que una persona escogería trabajar en vuestra organización antes que en otra. Si, el salario es importante. No hagas perder el tiempo a nadie si no va a seguir contigo en un proceso donde no os pondréis de acuerdo en ese punto. Comparte los beneficios que esa persona obtendrá a cambio de su talento, no mientas, pero no dejes nada que pueda atraerle: horario flexible, salario, posibilidad de tener beneficios, smart working, entornos de trabajo innovadores, metodologías agile y vuestra cultura colaborativa. Cuéntale dónde va a trabajar y cuáles van a ser sus condiciones, si es algo temporal o estable, la oficina, compañeros, un mismo lugar, diferentes ubicaciones, movilidad, etc.
Piensa que cada oferta es un mundo, y aunque a nivel cultural pueda ser la misma base, cada rol tiene sus peculiaridades. No hagas un simple copia y pega, trata de diseñar para cada vacante una llamada nueva.
Dónde publicar la oferta de trabajo
Debes tener en cuenta donde está el talento hoy, las redes sociales. Investiga en qué medio o canal debes poner más foco porque allí obtendrás más posibilidades de encontrar lo que buscas y comparte tu oferta de trabajo, Facebook, Twitter, Instagram y por supuesto LinkedIn. Ésta última la debes tener si o sí, pero en otra publicación hablaré de cómo debes utilizar como empresa esta red, para sacar el máximo rendimiento.
En tu career site, en las plataformas digitales de empleo como Infojobs o Randstad, portales segmentados por sectores, escuelas con bolsas de trabajo, o
Una oferta excesivamente corta o muy larga agobia y no es atractiva. Simplemente muestra vuestra forma de ser en esa llamada de atención. La oferta de trabajo es vuestro anuncio para atraer el talento. Cada canal tiene su lenguaje y formato, visualiza cómo lo hacen otras empresas en esos canales y adapta tu oferta de trabajo al medio.
El talento ha salido de compras y debes venderte lo mejor posible, siempre honestamente para poder destacar entre las muchas ofertas que hay por ahí. Si crees que con poner una oferta cualquiera te van a llover los candidatos, no estás entendiendo el valor que está adquiriendo el talento de verdad. Y ese valor va acompañado de poder de decisión.
Pon las cosas fáciles a los que te vean, dales la máxima información, haz que quieran no solo aplicar a la oferta, sino buscarse la vida, para tratar de ser los seleccionados porque realmente vean en esa oferta, algo distinto. Las empresas donde el talento brilla de verdad son las que tienen el brilli brilli del bueno. Y ese solo lo tendrás cuando te muestres de manera honesta, cercana y auténtica.
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excelente!
Muchas gracias Marlon!