Disfrutar del trabajo parece algo realmente nuevo. A muchos nos suena aún el discurso de que el trabajo es sacrificio, y de que lo que te gusta, es para el tiempo libre. En las organizaciones hay aún algún conflicto para asociar el concepto de felicidad o bienestar al de productividad y trabajo y Recursos Humanos trabaja para unificar ambos conceptos. Se puede disfrutar haciendo lo que te gusta en tu tiempo libre y también trabajando.
Profesiones como hobbies
Separar el disfrutar para los hobbies, es lo que hace que nuestro día a día esté lleno de grises, porque hemos dejado el color para el tiempo libre. Preguntar “¿a qué dedicas tu tiempo libre?” debería ser casi como “¿a qué te dedicas profesionalmente?”. La cuestión está en el concepto “disfrutar”. Por lo tanto, la pregunta es “¿con qué disfrutas?”
Alguien un día me dijo que eso solo les pasa a los famosos, los actores y los artistas. Eso no es cierto, lo que pasa es que no todo el mundo ha sabido encontrar el punto de conexión entre lo que nos hace brillar y a lo que nos dedicamos profesionalmente. Ahí está la clave, en dar con la profesión que permita que puedas vivir de tu afición.
Consejos para disfrutar del trabajo, las 7 A’s
Actívate
La parálisis va en contra del hecho de poder disfrutar del trabajo. Porque cuando uno entra en ese estado de inacción, se deja llevar y no toma decisiones. La pasividad nos hace seres inmóviles que no son conscientes de lo que sucede a nuestro alrededor. Es imposible disfrutar cuando no sabemos por qué hacemos lo que hacemos. Coge conciencia y el timón, actívate y decide qué quieres hacer. Para disfrutar debes saber qué te separa de ello o te conecta y decide si seguir así o puede que haya llegado el momento de reinventarte.
Actitud
Cuando todo va bien, todos estamos contentos. Cuando algo no encaja, es como si el puzle nos quisiera decir algo. Tu actitud para disfrutar del trabajo es esencial porque mucho de ese disfrute depende precisamente de cómo encaras la situación.
No siempre estamos en el momento y situación perfecta, así que tomarse las cosas con el equilibrio suficiente para entender que quizás mañana el día es mejor, ayuda. Se trata de tener la capacidad de entender el todo como ese puzle en el que somos una pieza más. Es importante aportar tu granito para que el ambiente sea bueno para todos, empatizar hace que los demás también te vean y puedan ayudar.
Adaptación
Es una de las competencias más valoradas en estos momentos. Saber adaptarte en cualquier circunstancia te va a permitir comprender el contexto en el que estás, hacer que el resto del equipo lo llegue a aceptar mejor y llegar a disfrutar del trabajo. En tu día a día haz que todo cuente, descansos, cafés con compañeros, la pausa de la comida. Lo que sea para que esa adaptación sea más sencilla y llevable. Esto te ayuda para que otra gran competencia, la resiliencia, te permita disfrutar del trabajo.
Alinéate
Cuando tienes una buena actitud, esto es más fácil. Pero piensa que, para disfrutar del trabajo, debes conectar con él. Y para eso, hay que estar alineado con él. Es importante haber saber qué te une a este trabajo, qué te gusta de él, que compartes y te interesa de ahí. Alinearse significa entender qué tenemos en común nosotros con el otro.
Amigos
Alguna vez he oído eso de “aquí no se viene a hacer amigos”. ¿De verdad? Cuando estoy con amigos, es cuando estoy mejor. Y si estoy mejor, rindo más. Algo se están perdiendo muchas organizaciones. Disfrutar del trabajo significa que podamos trabajar con personas con las que no solo tenemos que trabajar. La idea es que construyamos relaciones que nos aporten, que nos nutran, que nos sirvan para ser mejor.
Los amigos nos ayudan, nos escuchan y son en quienes confiamos. Disfrutar del trabajo cuando se hace con amigos, es mucho más fácil. Y las empresas deberían tomar nota. Cuidar tu entorno y clima laboral pasa por cuidar las relaciones. Cuando conectamos con alguien, y nos cuidamos, es fácil llegar a convertirnos en amigos. Y ahí sí podemos disfrutar del trabajo.
Aprende
Poder estar en constante aprendizaje nos abre la mente. Tener nuevos conocimientos, nos permite estar más implicados, más anclados a nuestro trabajo. Saber más nos hace ser más conscientes y tomar mejores decisiones. No es un puesto de trabajo, se trata de disfrutar del trabajo. Es importante saber cuánto más mejor, para poder aportar mejores soluciones y hacer que la organización pueda seguir evolucionando.
Autoconocimiento
Es la base de muchos de los procesos que tratan de mejorar la relación entre uno mismo y la organización o su trabajo. Se trata de conocernos bien, de entender qué nos motiva, no solo para pasar el rato. Disfrutar del trabajo es algo necesario porque vamos a pasar muchas horas con él, así que es mejor que sea algo que no solo hagamos bien, sino que nos guste hacer.
Por ello, es importante hacer un parón para entender si lo que hacemos en nuestro trabajo es realmente lo que nos encanta o somos de los que está contando las horas para irse de fin de semana, y que se deprime el domingo por la tarde, por tener que ir a trabajar al día siguiente. Busca técnicas que te ayuden a entenderte mejor, a saber, cuál es tu talento y de qué manera podrías monetizarlo. En muchas ocasiones verás emprendimiento, en otras, soluciones para muchas organizaciones.
Sentir satisfacción y por lo tanto disfrutar del trabajo depende de varios factores, y algunos no dependen de ti. Lo importante es ser consciente de aquellos que sí lo hacen e incidir para que jueguen a tu favor. No siempre estamos donde nos gustaría, y ahí puedes hacer 2 cosas: ser consciente y tomar decisiones. Puedes seguir ahí siendo consciente mientras buscas aquello que sí te hace feliz, pero debes saber por qué estás donde estás y decidir qué quieres hacer.
Encontrar diversión no siempre es fácil, pero puedes encontrar puntos de conexión que te hagan estar más cerca de tu propósito. Se trata de que no solo te diviertas en tu tiempo libre, y todo el tiempo que le dedicas a tu trabajo, sea igualmente satisfactorio.
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